El virus H1N1 no tiene alta letalidad pero las conductas de los funcionarios si.
El desprecio por la vida en Argentina manifista su increible potencial metonímico. El dia 28 de junio las principales fuerzas políticas organizaron actos-reuniones-festejos multitudinarios en espacios cerrados durante la fase de crecimiento de la epidemia de Gripe A. Sin distinción de partidos, los oficialistas de la Nación (PJ), y de la Ciudad de Buenos Aires (PRO) reunieron varios cientos de personas a bailar, abrazarse y cantar, con pleno conocimiento de la situación sanitaria. El Jefe de Gobierno porteño bailaba impulsando su candidatura a presidente abrazando a varios de sus complices, algunos de ellos hoy infectados con el virus. Seguramente no deben hacer colas en Hospitales públicos. Los expertos sanitaristas que hoy piden tranquilidad no desconocían la situación y no se los escucho pedir responsabilidad a sus jefes para evitar situaciones evitables de contagio.
En momento de desborde real y mediático de la epidemia el país se encuentra sin ministro de salud, y sin póliticas claras para contener la situación, quedando el manejo de la información en manos de los medios de comunicación. Cierran 10 escuelas, en Pergamino suspenden todas las actividades, la ciudad de Buenos Aires pide prudencia a los ciudadanos, pero no suspende eventos masivos. Porque no suspende los controles de alcoholemia a conductores y apela a la responzabilidad de los mismos.
La presidenta toma juramento al nuevo ministro de Salud acusado de manipular las cifras de mortalidad infantil en Tucuman, y otra vez un acto en espacio cerrado colmado de gente, abrazos y besos. Nuevamente solicitan responzabilidad. Que la AFA de Don Julio Grondona decida la conveniencia de reunir 50000 personas en un estadio de futbol, o tal vez Carlos Babington pueda fijar pautas de control epidemiológico. La barra brava de Huracan luego de solucionar sus diferencias con el modico costo de tres muertos podría encargarse de administrar la prudencia.
Otra vez le toca poner el lomo a los laburantes hacinados en medios de transportes indecentes; trabajadores de la salud,docentes, cajeras de supermercados, etc, etc, etc.
Los lideres del descuido, del desprecio por la vida, de la violencia no deben estar alli por casualidad. Como sociedad, comunidad, grupo humano o lo que seamos, hemos construido las condiciones ideales para el virus del desamparo.
La pequeña comunidad nomosexual propone CUIDADO, SOLIRARIDAD Y RESPETO ANAL.
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